Tanto a lo largo y ancho de la provincia, como en la ciudad con la que comparte nombre, Valladolid ofrece a todo tipo de viajeros miles de opciones para disfrutar de unos días de turismo inolvidables.
Fue capital del reino cuando un antiguo monarca encontró a su amante Pucela en estas tierras. Pero en la actualidad, recorrer sus calles conseguirá maravillarnos con su belleza.
En el Casco Antiguo de la ciudad, podremos circunscribir uno de los espacios más emblemáticos de Valladolid. Desde la calle Solanilla, donde se ubica la Iglesia de Nuestra Señora de la Antigua, hasta la Plaza Mayor, encontraremos las calles que llevan el nombre de los oficios que dejaron huella en la ciudad, como Cascajares o Ebanistería.
Paseando por todas sus calles, encontraremos establecimientos donde disfrutaremos de los mejores vinos y gastronomía de la ciudad.
Pero donde mejor podremos disfrutar del enoturismo en la comarca es en el Museo Provincial del Vino, situado en el Castillo de Peñafiel. Declarado Monumento Histórico Nacional en 1917, se encuentra en el corazón de la Ribera del Duero. Su figura se compara con la de un navío anclado en mitad de la meseta castellana. Desde el Museo se da a conocer la riqueza enológica de la provincia, la cual posee el mayor número de denominaciones de origen de España, aumentando hasta cinco, además de la historia y procesos de elaboración de este maravilloso néctar. Desde la Torre de Homenaje podremos disfrutar de un mirador privilegiado de las riberas del Duero y Duratón, del valle e Botijas y de viñedos y pinares.
Otra oportunidad que tendremos en Valladolid es la de surcar el mar. Gracias al Canal de Castilla, que se compone de una red de canales de navegación que facilitaban el transporte de lana, vino y cereal en la entonces aislada Castilla. Considerado como el único canal navegable de toda España, llega también a las provincias de Palencia y Burgos. Se dejó de trabajar a lo largo de sus aguas a mediados del siglo pasado, pero en la actualidad nos brinda la oportunidad de recorrerlo gracias a distintos ferrys.
Para los amantes del senderismo y de las rutas por la naturaleza, desde las ruinas del Monasterio de Santa María de Matallana, entre Montes Torozos y Tierra de Campos, se inician distintos recorridos. Con un entorno natural de los más bellos de la provincia, podremos recorrer los diferentes sederos andando, en bici, en burro o, incluso, en carro de caballos.
Para los amantes de la historia, en la localidad de Almenaras-Puras se encuentra el Museo de las Villas Romanas, donde podremos visitar una verdadera villa, pasear por sus distintas habitaciones e, incluso, llegar hasta sus termas.
Disfrutar de Valladolid, de su entorno, su historia y su gente no sería lo mismo si no se descansa también en plena naturaleza.
Desde Bungalows Cubillas podréis realizar distintas rutas, tanto por la provincia como a la ciudad. Además, se encuentra en las cercanías al Canal de Castilla, por lo que es la opción perfecta para visitar los puntos que os hemos recomendado.
¡No lo dudes! Una visita a Valladolid hará que disfrutes de la belleza de Castilla y León.