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FrançaisEl Camino Portugués
Siguiendo la estela que marca el camino portugués, que cada año recorren miles de peregrinos, tendremos la oportunidad de conocer los lugares más emblemáticos del norte de Portugal. Nuestro viaje comenzará en Lisboa; seguirá por Tomar, una ciudad templaria, Coimbra y Oporto; y terminará en el pintoresco pueblo de Tui y la ciudad de Santiago de Compostela.
Portugal ofrece paisajes idílicos y rincones urbanos llenos de encanto
Lisboa es, además del punto de partida de nuestro camino hacia Santiago, una localidad llena de magia y encanto que no dejará indiferente a nadie. Su casco histórico, al que conviene dirigirse a pie, se le conoce como La Baixa y tuvo que ser reconstruido en el siglo XVII después de que un terremoto arrasara buena parte de la ciudad. Sin duda, la creación más espectacular de todas es la Plaza del Comercio, uno de los principales emblemas de Lisboa por estar ubicada en el mismo lugar donde se levantaba el Palacio Real antes del terremoto. La plaza destaca también por la belleza de los edificios que la rodean y por poseer un impresionante Arco del Triunfo de estilo barroco en una de sus entradas. Además, en el centro alberga una imponente estatua ecuestre del rey José I, que lideraba el país cuando ocurrió la desgracia.
Viaje al pasado en tranvía
Si salimos atravesando el arco de la plaza llegaremos hasta la Rua Augusta, una de las calles más comerciales de La Baixa, que se encuentra flanqueada por antiguas avenidas que ocupaban los gremios, como la Rua Aurea y la Rua da Prata. Recomendamos dar un paseo por toda la zona y seguir avanzando hasta la Plaza del Rossio, uno de los lugares más animados y con más bares, restaurantes y terrazas donde elegir. Si el tiempo es bueno, aconsejamos disfrutar de las vistas y del ambiente con una copa de vino y una tabla de los quesos típicos de la zona. Los más golosos pueden aprovechar la parada para probar la «Ginjinha», un licor de cerezas muy dulce y muy característico de la capital portuguesa.
El barrio bohemio y Belém
Al anochecer aconsejamos volver hasta la Plaza de los Restauradores para tomar el Elevador de Santa Justa o el Elevador Da Gloria, que nos llevarán hasta el Chiado, el barrio más bohemio de Lisboa. En la Rua Garret se encuentra el café A Brasileira, donde la mayoría de los turistas hacen una parada para fotografiarse junto a la escultura de Fernando Pessoa.
Todavía nos queda por descubrir uno de los barrios más importantes de Lisboa, el barrio de Belém, donde se escondenn dos grandes joyas monumentales; el Monasterio de los Jerónimos, que cuenta con una iglesia y un claustro preciosos, y la famosa Torre de Belém, por lo que recomendamos pasar la noche en uno de los alojamientos con bungalows y cabañas de la zona.
A orillas del río Mondego
La siguiente ciudad que visitaremos es Coimbra. Esta localidad, ubicada a orillas del río Mondego, está llena de contrastes, ya que primero fue ocupada por los godos y después por los romanos, los visigodos, los mozárabes y los cristianos. Aconsejamos empezar la visita por la Universidad de Coimbra que, además de ser una de las más antiguas de Europa, ofrece a los turistas unas vistas inmejorables de la ciudad y los alrededores. Desde BungalowsClub proponemos la estancia en Bungalows Coimbra, un precioso complejo rural de cabañas y bungalows llenos de encanto.
La fase final de nuestro Camino de Santiago Portugués se desarrolla en España. Un pueblo fronterizo que no podemos dejar de visitar es Tui, en el que llama la atención la Catedral de Santa María, que mezcla en su fachada importantes estilos arquitectónicos, como el románico y el gótico español. También merece la pena acercarse al convento de las Clarisas, el convento de Santo Domingo y la capilla de San Telmo. Desde aquí llegamos a Santiago de Compostela, capital gallega con posibilidades infinitas.
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